Esta institución mantiene el orden público pero a la vez se puede sentir una especie de represión por parte de la fuerza pública ya que para las manifestaciones actúan con mucha violencia, pero a la vez arriesgan sus vidas en allanamientos o protestas. Un ejemplo claro de esto, el cabo Cristián Vera, muerto el 11 de septiembre del presente año por una bala sin rumbo, este cabo fue el mártir 1011 de la institución.
Por otro lado, se podría ejemplificar la represión con el golpe que recibió el senador Alejandro Navarro de parte de un policía de servicio en una manifestación.
En conclusión, la policía chilena tiene en parte de los dos elementos inicialmente mencionados, es una institución creada para dar protección a la población pero de la misma forma sería un agente de represión de los manifestantes.
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